sábado, mayo 23, 2009

ÉTICA DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN

Dra. Yanyn Rincón Quintero

Nunca antes como ahora los medios de comunicación se encuentran inmersos en el dilema de qué decir, cómo decirlo, cuándo decirlo y dónde decirlo. Las nuevas tecnologías de la información; la comunicación, la inmediatez de la noticia, el mundo globalizado, la sociedad más informada y alerta de lo que acontece, ya no solo en su entorno, también en su estado o región o el mundo entero, han convertido a los medios de comunicación social en agentes, actores y protagonistas de atención mundial.

Los MCS se han convertido en referentes obligatorios y agentes difusores para comprender la sociedad actual, la que con toda razón la han llamado: Sociedad de la Información. De esa realidad que se está viviendo es que nace la convicción en ellos, de interpretar y ponerse acorde con los tiempos. De allí la importancia que tienen los MCS de definir e implementar códigos de ética que vayan de la mano con el mundo.

Es cierto que la gran mayoría de los MCS poseen códigos que regulan, por así decirlo, el comportamiento ético de sus trabajadores, periodistas, directivos y personal administrativo. Pero también es cierto que la gran mayoría de esos códigos consisten en unas largas listas de lo que se debe y no se debe hacer que finalmente pocos leen y otros pocas más cumplen.

Convencidos de esta necesidad los MCS están realizando procesos de reingeniería que no solo comprende el aspecto de presentación visual del medio y el diseño gráfico, en el caso de los impresos, el proceso implica un cambio de visión en cuanto el papel trascendental en la sociedad actual.

Muchos medios ya han interiorizado que su rol ya ha pasado a ser de mera información y opinión, para convertirse en gigantescas ventanas por donde el mundo se asoma a la realidad, atribuyéndoles el papel, en muchas ocasiones, de forjadores de opiniones y lo que es más importante en guías de conductas del colectivo.

Suprema responsabilidad esta última, guía de conductas del colectivo, es allí donde un código de ética representa un medio importante para saber asumir esa responsabilidad social. El medio está en la obligación de conocer cuales son las barreras en la comunicación que impiden y que deforman su rol, y más obligante es el de superarlas y presentarse como un medio plural, donde todos puedan llegar y al que todos puedan catalogar como creíble, sin ninguna interferencia, ni política, económica, racial o religiosa.

Con base a lo anterior, me permito con todo respeto refrescar a mis colegas Comunicadores Sociales; Periodistas de Medios Impresos, Periodistas de Medios Audiovisuales; Columnistas, Relacionistas Públicos; Publicistas, Publirelacionistas y Comunicadores Corporativos; la necesidad de una actuación profesional con apego a los códigos de éticos y deontológicos; insisto en la necesidad de fortalecer la identidad del Comunicador Social y de elevar el nivel académico profesional; el tono de debate, el discurso que trasciende a un mero oficio; en virtud de nuestro tránsito por las aulas universitarias; para no caer en provocaciones que irrespetan la dignidad periodística y ciudadana; ya que “los errores de los otros jamás podrán justificar nuestros errores”.

Por su parte, el Gobierno está llamado a ejercer las máximas de Relaciones Públicas que nos legara Edward Bernays; padre teórico de esta disciplina:

• Actuar como Casa de Cristal y Libro Abierto: Ello refiere la necesidad de transparencia en la información y actuación de los poderes e instituciones del gobierno; los cuales no constituyen un ente privilegiado y exento del cumplimento normativo; por contrario debe impulsar las normas éticas de la comunicación social con el ejemplo.

• Decir la verdad, de la mejor manera y en el mejor momento: En ocasiones aún y cuando manejamos la verdad o una parte de ella; se pierden las perspectivas de cómo y cuando informar; el uso de la fuerza y el abuso del poder y autoridad no resulta un buen mecanismo para imponer criterios y verdades; asimismo el uso de un lenguaje que se aleja de lo coloquial para ubicarse en lo procaz y soez; irrespeta en mucho la majestad de los cargos de diversos funcionarios y por ende del colectivo.

• Hacer las cosas bien y darlas a conocer: Dar a conocer lo bueno es importante; en especial, cuando todo lo que haces está en esa dirección; pues como reza el refranero “quien tiene techo de paja jamás se acerca a la candela”. Toda actuación ética es fácilmente proyectable en positivo; sin embargo, muchos actores sociales cuyas acciones están fuera del marco de eticidad y legalidad sienten casi una ofensa cuando se publican los reflejos de estas.

En tal sentido, la transparencia se ha constituido en un valor imprescindible en atención a la responsabilidad social que ostentan en la actualidad los medios de comunicación social, empresas informativas, profesionales de la comunicación social y ciudadanía en general para garantizar una comunicación social libre de zonas grises, vicios y anomalías éticas, para lo cual se requiere un marco de libertad de prensa; libertad de credo y culto, pluralidad informativa, derecho a la información y una plataforma comunicacional e informativa que sirva para respaldar la actuación socialmente responsable de los Comunicadores Sociales en ejercicio sea como Periodistas de Medios Impresos; Periodistas de Medios Audiovisuales; Comunicadores Corporativos, Publicistas, Relacionistas Públicos y Publirelacionistas.

Todo lo anterior nos permite inferir que ante la diversidad de actores o agentes involucrados en el proceso comunicacional de difusión e información en un país entran en choque diversidad de valores, creencias y criterios que requieren el establecimiento de acuerdos que permitan homologar la ideología a partir del establecimiento de una normativa o código ético que garantice la motivación, información, comunicación, difusión y persuasión, reforzando los niveles de libertad, credibilidad, confianza y adhesión garantes de gobernabilidad corporativa, democracia, respeto, tolerancia, biodiversidad, sustentabilidad, desarrollo y prosperidad de la nación.

Dra. Yanyn Rincón Quintero
Doctora en Ciencias Gerenciales (URBE, 2006). Magíster Scientiarum en Administración de Empresas Turísticas (LUZ, 2000). Licenciada en Comunicación Social, Mención Publicidad y RR.PP. (LUZ, 1993). Docente – Investigadora de La Universidad del Zulia. Investigadora PPI Nivel Candidato Nº 6857. Miembro del CNP – Zulia Nº 7.798. Miembro del Colegio De Relacionistas de Venezuela Nº 0442. Miembro de ASOVAC - Zulia. Miembro INVECOM. Fundadora del Proyecto Cátedra Abierta de Relaciones Públicas. Miembro Directivo CNP-Zulia Período 2008-2010.
e-mail: yanynrincon@gmail.com


Maracaibo, 23 de mayo de2009

No hay comentarios.: